El celeste aprovechó las pocas que tuvo y cumplió en la final de ida.

Un domingo de clima ideal, con un marco espectacular que nos brindó la final de ida del Clausura 2025 de la Liga Regional, que enfrentaba a San Martín y Sportivo Norte en un duelo chivo que revivía un poco aquella rivalidad del 2021 donde se encontraron en la misma instancia.

Como todo partido de ida, se espera hermetismo, quizás un poco más de búsqueda de parte del local, y un poco más de aguante de la visita, y la cosa no estuvo tan lejos de ese panorama. Un duelo que era más friccionado que jugado, con pocas situaciones de gol, encontró una genialidad de Lautaro Fernández para desparramar la defensa norteña y anotar el primer tanto. El panorama oscurecía aún más cuando en la visita se iba expulsado Nicolás Godoy por doble amarilla.

En el complemento, la disparidad numérica casi no se sentía, las chances de gol seguían escaseando, pero llegaría otra genialidad, esta vez desde la vereda de enfrente cuando Lucas Ortíz acarició la pelota con su zurda en un tiro libre que dejó a Tobías Escudero mirando como entraba la pelota en su palo izquierdo.

Ahora si, la localía, el hombre de más y el empuje de su gente obligaron al celeste a ir por más con más ganas que ideas, pero lo consiguió a los 45 minutos, otra vez en los pies del «tato» Fernández que (con su corazón en el rojo) fue y le dedicó el tanto a la parcialidad visitante.

2 a 1 para los de Darío Ferrari, que ahora debe idear como aguantar la ventaja que es mínima, en un Parque Colón que será una caldera. El conjunto norteño, obligado a ganar para aspirar a una nueva épica. Recordemos que un empate global fuerza una tercera final.